COCA DE NARANJA.

Hola, hola hoy voy a hablaros de mis clases de tonificación, ja, ja, ja, bueno de la última clase antes de las vacaciones de Navidad. Todos los años el último día de clase antes de Navidad hacemos un ratito de gimnasia y luego preparamos una mesa improvisada, mantel en el suelo, café, té o chocolate caliente, dulces navideños, dulces caseros preparados por algunas de nosotras, tarjetas de Navidad para todas ... en fin que pasamos un buen rato. Desde aquí un besito para mi profe Bienve por la paciencia infinita que tiene conmigo.

El año pasado Amparo hizo una coca de naranja buenísima así que le pedí la receta y la verdad es que entre unas cosas y otras no pude hacerla. Ahora que estamos cogiendo naranjas del huerto he pensado que era el momento y vaya qué éxito!está realmente deliciosa y más fácil de hacer no puede ser.
De hecho en la receta que me pasó mi compañera ella lo mezcla todo en un bol y le pasa el brazo batidor de cuchillas de toda la vida (la minipiner je, je) y al horno. A mí me gusta tamizar los ingredientes secos, montar los huevos con el azúcar ... pero bueno eso son manías mías, cada uno que lo haga como quiera je, je, je.

Los ingredientes son:
3 huevos.
1 vaso de azúcar.
1 vaso de zumo de naranja natural.
1 vaso bien lleno de harina.
1/2 vaso de aceite de oliva suave.
la ralladura de 1 naranja.
1 sobre de levadura química (tipo Royal).
4 onzas de chocolate negro. (Opcional).

Se precalienta el horno a 200 grados.
Se tamizan la harina y la levadura química juntas.
Se montan los huevos con el azúcar con una batidora de varillas eléctrica, cuando estén espumosos se añade el zumo y la ralladura de naranja y se vuelve a batir, se añade el aceite y se incorpora también. Se añaden los ingredientes secos y opcionalmente se puede añadir el chocolate picado a cuchillo, se mezcla todo con una espátula, se mete en un molde y al horno sobre 35 minutos.

No es una coca que suba mucho pero queda muy tierna y jugosa, También se puede fundir el chocolate y cubrir la coca en vez de picarlo y otra opción es no poner chocolate y cuando esté fría espolvorearla con azúcar glass.

Bye.

BRIOCHE.

Hola, hola mi vida ha cambiado desde que hago brioches, no, no exagero. Siempre quise saber cómo se hacía e incluso llegué a plantearme hacer algún curso pero gracias a Loleta Bernabé la autora del blog Loleta Life, Market & Cooking he conseguido hacer unos brioches espectaculares, blanditos y esponjosos, con un sabor increíble.

El brioche es lo que tiene que cada uno lo come con lo que le gusta, a mí personalmente me gusta con aceite de oliva y jamón serrano, mi marido con mermelada de fresa, mi sobrina con una onza de chocolate, mis padres con la mermelada de membrillo casera que ha hecho mi madre recientemente, mi hermana con jamón de york y queso ... ja, ja, ja os lo juro cada uno tiene su preferencia.

Esta receta como la de cualquier pan necesita de tiempo y paciencia pero si no tienes prisa no es nada difícil. La masa debe subir las veces que haga falta y para eso un domingo por la mañana, por ejemplo, es ideal je, je, je.

Como en casa gusta tanto yo los hago de 2 en 2, así que los ingredientes que uso son:
6 huevos.
120 grs. de leche.
500 grs. de harina de repostería.
2 pastillas de 25 grs. cada una de levadura fresca.
la ralladura de 1 limón.
160 grs. de mantequilla.
120 grs. de azúcar.
1 pellizco de sal.
para pintarlos 1 huevo batido con 2 cucharadas de leche.

Lo primero que hago es calentar un poco la leche en el microondas y deshacer en ella la levadura.
Poner los huevos a batir en la amasadora y añadir la mezcla anterior, mientras se bate se va añadiendo la harina a cucharadas hasta que esté todo integrado y la masa se vea lisa. Ahora hay que taparla y dejarla reposar en un sitio cálido y sin corrientes de aire hasta que doble el volumen (entre 45 y 60 minutos). Los tiempos de levado dependen mucho de la temperatura ambiente, cuanto más frío hace más le cuesta subir pero con paciencia acaba subiendo.

Cuando la masa esté a punto se añade el azúcar, la sal, la ralladura de limón y la mantequilla blandita y se amasa de nuevo hasta que esté lisa y brillante. Se reparte en los dos moldes (yo uso los típicos larguitos de plum cake) y se dejan reposar otra vez para que suban (entre 30 y 40 minutos).

Cuando estén casi se enciende el horno a 200 grados para que vaya calentándose y cuando hayan subido se pintan con el huevo batido y la leche. Se pueden espolvorear con azúcar perlado o sésamo.
Antes de meterlos al horno hay que poner una bandeja con agua hirviendo bajo del todo para que genere vapor y en el segundo nivel se meten los moldes de los brioches. Yo los tengo unos 40 minutos, como siempre depende de lo grande que sea el molde.

Ahora sólo queda encontrar los ingredientes con los que te guste acompañarlo e ir cortando, calentándolo en una tostadora y comiendo ja, ja, ja. Ya vereis como ya no podreis estar mucho tiempo sin hacer brioche.

Bye.