viernes, 26 de febrero de 2016

BRAZO DE GITANO RED VELVET.

Hola, hola la semana pasada estuvimos en un cumpleaños muy especial, una persona muy querida por mi familia, el tío Pepe, cumplió 80 años y sus hijas (que son casi como hermanas para mí) le prepararon una fiesta sorpresa.
Fue superemocionante juntarnos todos, familia, amigos, vecinos de toda la vida que ahora cada uno vivimos en un sitio ... y es que criarnos juntos a la manera de los 70 une mucho ja, ja, ja.

Como quería llevarles algo estuve pensando y al final me decidí por un brazo de gitano. Es un dulce que siempre prepara mi hermana y yo no lo había hecho nunca, así que pensé que ya iba siendo hora de que hiciera yo uno y como no podía ser de otra manera lo iba a hacer diferente je, je, je.
Así que con mi osadía y el "savoir faire" de mi hermana nos ha salido el brazo de gitano más increíble que he probado nunca.



Quedó un bizcocho muy esponjoso y muy equilibrado de dulzor, vamos que para ser el primero ... fue todo un éxito ja, ja, ja.
Los ingredientes que utilicé para la plancha de bizcocho son:
6 huevos.
6 cucharadas soperas de azúcar.
5 y media cucharadas de harina.
Media cucharada de cacao puro.(Yo uso Valor sin azúcar).
Media cucharadita de las de café de colorante en pasta rojo (red red Wilton).
Para el relleno:
1 bote de 250 grs. de queso mascarpone. (Yo lo compré en Aldi pero lo hay en cualquier supermercado).
1 brick de 200 ml. de nata para montar (35% de materia grasa).
100 grs. de azúcar glas.
Unas gotas de esencia de vainilla.

Lo primero que hice fue el relleno porque es conveniente que esté en la nevera unas horas, yo por comodidad lo hice la tarde anterior. Para ello tamicé el azúcar glas y monté con la batidora de varillas la nata con la mitad del azúcar glas  (no os paséis o se os cortará convirtiéndose en mantequilla je, je).
Por otra parte mezclé el queso, el azúcar glas restante y la esencia de vainilla  con una varilla de mano. Cuando estuvo integrado mezclé con la nata y removí hasta que quedó una crema fina.
Id con cuidado y no os paséis para que no se os quede líquido. Guardar en un recipiente bien tapado en la nevera.
Para hacer el bizcocho lo primero es encender el horno a 180 grados.
Separar en 2 bols grandes las claras y las yemas.
Primero montaremos las claras porque si lo hacemos al revés tendremos que limpiar la batidora, la grasa de las yemas no dejaría que se montaran las claras. A medio montar echaremos 4 cucharadas de azúcar y seguiremos montando hasta que queden firmes y brillantes, a punto de nieve.
A continuación metemos la batidora en las yemas y le damos un batido rápido, para romperlas simplemente y añadimos 2 cucharadas soperas de azúcar y el colorante y batimos hasta que dupliquen el tamaño y se vean esponjosas.
Se incorporan las yemas a las claras y se tamiza sobre la mezcla la harina y el cacao y con una espátula suavemente se va removiendo de arriba a abajo para que la mezcla no pierda aire hasta incorporarlo todo y que no se vea ni un grumo de harina.
Se prepara la bandeja con un papel de horno y se echa la masa suavemente repartiéndola con la espátula hasta que esté totalmente nivelada.



Se cuece a 180 grados 10-12 minutos, según el horno. Yo lo pongo con calor arriba y abajo pero sin aire. Cuando esté en su punto lo sacamos y lo volcamos sobre un paño limpio, con el papel hacia arriba para quitárselo, con mucho cuidado y poco a poco.


Lo envolvemos con el paño dándole la forma y lo dejamos que se enfríe del todo.

Cuando haya perdido el calor le untamos una buena capa del relleno con una espátula o cuchillo de punta redonda.


Os sobrará crema pero no os la comáis, aunque sé que será difícil conteneros, porque luego para rematar las puntas viene muy bien.
Ahora lo enrollamos siempre sobre el lado más largo. Cortamos las puntas y con la crema que ha sobrado rematamos las puntas para que quede bonito.
Cuando vayáis a servirlo lo decoráis a vuestro gusto yo le puse azúcar glas con un colador y unas lineas de Colacao.




Espero que os guste tanto como a mí.
Bye.

viernes, 19 de febrero de 2016

PASTA MARINERA.

Hola, hola hoy estoy contenta porque os traigo una receta fácil y buenísima, además es de pescado que parece que cuesta encontrar recetas con pescado que gusten a todo el mundo y sean fáciles de hacer. ¿A quien no le gustan unos espagueti con trocitos de pescado sin espinas?



Es muy simple lleva gambitas, mejillones, calamares, trocitos de atún y de emperador ... lo que os guste. A mí me gusta ponerle los mejillones frescos, abiertos a parte, pero si los ponéis congelados os ahorráis el tener que limpiarlos y abrirlos en un cazo a parte, aunque yo lo prefiero.



La pasta es una fuente de hidratos de carbono de absorción lenta lo que nos proporciona energía para desarrollar actividades de todo tipo y proporciona sensación de saciedad. En sí la pasta no es un alimento completo puesto que no tiene proteínas ni vitaminas pero es ideal para mezclarla con verduras, carne o pescado.



Bueno voy con mi receta, los ingredientes para 4 personas son:
1 paquete de 250 grs. de espagueti (a mí me gusta el nº 3 de Gallo).
12 gambas (yo suelo usar la arrocera con piel pero hoy había gambusín fresco).
12 mejillones.
3 calamares pequeños.
Unas mollitas de emperador y de atún (lo que tenga el pescadero, a veces pongo musola).
1 cebolleta y 1 diente de ajo cortados finitos.
1 brick de tomate frito (200 grs.)
vino blanco, perejil fresco, aceite de oliva.

Se limpian los mejillones y se ponen al fuego en un cazo con un chorrito de vino blanco y se tapan para que el vapor los abra. Enseguida que se abran hay que retirarlos, quitarles las conchas y reservar los mejillones en un poco del caldo obtenido.
Se pone una olla con abundante agua al fuego para hervir la pasta.
Se limpian y se cortan los calamares y si tenéis algún trozo grande de pescado. Tienen que quedar trozos de bocado, ni muy grandes ni muy pequeños para que no se desmenuce.
En una sartén se pone un chorrito de aceite de oliva y se sofríe el ajo y la cebolla picados finamente.
Se le da una vuelta y cuando esté la cebolla transparente se echa todo el pescado y se añaden los mejillones (sin el caldo), se sofríe y se añade el tomate frito. Se añade un poco de caldo de los mejillones y se baja el calor al mínimo.
Cuando el agua hierve se le pone un buen pellizco de sal y a mí me gusta poner media pastilla de concentrado de caldo de pescado. Se incorpora la pasta y se deja hervir hasta que saquéis un espagueti y esté a vuestro gusto, yo lo prefiero al dente pero cada uno es cada uno je, je.
Cuando los espagueti estén listos se escurren y se vuelcan sobre el sofrito, se le da a todo una vuelta para que quede toda la pasta impregnada del sofrito y se espolvorea con perejil fresco cortado muy fino.


Espero que la probéis.
Bye.

viernes, 12 de febrero de 2016

CUPCAKES DE MARSHMALLOWS (NUBES).

Hola, hola se acerca San Valentín y es la excusa perfecta para hornear algún dulce, así que estuve mirando por internet y me llamó la atención las recetas con marshmallows o nubes de chuche, así que compré una botellita de concentrado con sabor a nube, un colorante en pasta de color rosa y una bolsa de minimarshmallows (también los hay tamaño micro je, je, je) y todo lo demás son ingredientes que tenemos en casa.


Saqué mi nuevo molde de silicona de corazones y unas cápsulas rígidas que van genial porque no necesitas ningún molde especial y me puse manos a la obra.


Los ingredientes que utilicé son:
3 huevos.
200 grs. de azúcar.
100 cls. de aceite de girasol.
200 grs.de harina.
1/2 sobre de levadura química (tipo Royal).
120 cls. de leche.
1 cucharada de esencia de vainilla.
Unos cuantos minimarshmallows.

Esta receta como todas las de cupcakes es muy sencilla y no hace falta tener ninguna máquina especial, con una simple varilla se pueden hacer las bases, después para la buttercream sí que necesitaremos una batidora de varillas eléctrica.

Lo primero es encender el horno a 200 grados y preparar los moldes.
Se mezcla el aceite con el azúcar en un bol, se van incorporando los huevos uno a uno y batiendo la mezcla.
Se tamiza la harina con la levadura y se incorpora, con una espátula lo removemos para que no quede ni un grumito. Se añade la vainilla a la leche y se echa al bol, con la espátula se remueve con cuidado hasta que quede una crema fina y lisa.
Se rellenan los moldes que elijamos hasta la mitad, se ponen unas pocas mininubes y se pone un poco más de masa encima para que las cubra.



Lo metemos al horno entre 25 y 30 minutos a 180 grados.
Siempre hay que tener en cuenta la capacidad del molde, cuanto más grande sea más tiempo de horneado necesitará.
Cuando están cocidos, a mí me gusta pinchar uno en el centro para comprobar que el cuchillo sale seco, se sacan sobre una rejilla y se dejan enfriar. Ir con cuidado cuando pincheis los bizcochos que hagais en moldes de silicona, siempre con cuchillo sin punta o con palillos.



Para la buttercream:
200 grs. de mantequilla a temperatura ambiente.
200 grs. de azúcar glass tamizado.
una cucharadita de concentrado sabor de nube.
una pizca de colorante rosa.

Batir la mantequilla con una batidora de varillas eléctrica unos minutos hasta que esté esponjosa, tamizar sobre la mantequilla el azúcar glass y mezclarlo un poco con una espátula a fin de que al meter de nuevo la batidora no salga todo volando. Batir 5 minutos hasta que quede una crema firme, añadir una cucharadita de concentrado de sabor a nube y con un palillo una pizca de colorante.
Batir un poco más hasta que quede todo uniforme.
Con el colorante hay que ir poco a poco porque si os pasais ya no hay vuelta atrás y los colorantes en pasta tiñen mucho, yo suelo usar los de la marca Wilton.
Poner la buttercream en una manga pastelera con boquilla rizada y decorar.




Espero que os gusten, es un sabor que a los niños les encanta.

Después de algún tiempo las he vuelto a hacer para una niña muy especial que se llama Elena, así que os dejo unas fotos porque quedaron preciosas.
Sólo decir que éstas no van con buttercream sino que simplemente monté un brick de nata de 35% de m.g. con unas gotas de concentrado de sabor a nube y una pizquita de colorante rosa.
Ah! y una nube para decorarlas, a que han quedado chulas?






Bye.

jueves, 4 de febrero de 2016

ENSALADA TEMPLADA DE QUINOA.

Hola, hola he descubierto la quinoa y tengo que decir que ha sido un hallazgo muy interesante primero porque está muy buena y después por lo sana que es.



A la quinoa la denominan pseudocereal porque en realidad es una semilla pero se consume igual que un cereal. Además de los hidratos de carbono contiene muchas proteínas y un alto contenido en fibra lo que la convierte en un alimento muy completo para todo el mundo: para vegetarianos, deportistas, celíacos (no contiene gluten), diabéticos (bajo índice glucémico) y para gente que quiera cuidar su dieta puesto que las grasas que contiene son ácidos Omega 3 y 6  lo que también ayuda a controlar el colesterol. Contiene vitaminas del grupo B y vitamina E (antioxidante).

Aquí he copiado un cuadro con los minerales que contiene comparado con otros cereales.


Como veis la quinoa es un superalimento y aunque para alguno de nosotros sea nuevo las civilizaciones precolombinas de América Latina ya se alimentaban con ella.

La quinoa se debe de lavar porque en su capa exterior hay una sustancia (saponina) que tiene sabor amargo, entonces lo que hago yo es verterla en un colador grande de malla fina y debajo del chorro del grifo la voy moviendo con los dedos para quitarle el amargor.



Se puede utilizar como el cous-cous, en tabulé, en sopas, ensaladas ...
Yo os voy a dar una receta que queda muy buena y se puede terminar al gusto de cada uno.

ENSALADA TEMPLADA DE QUINOA.
Para 6 personas:
150 grs. de quinoa.
1 calabacín.
1 cebolla.
300 cl. de caldo (yo uso el de pollo de brick).
1 lechuga (A mí me gusta mucho la hoja de roble o la lechuga iceberg).
1 pechuga de pollo.
1 puñadito de pasas sultanas.
Aceite, vinagre balsámico caramelizado, sal y pimienta.

Lo primero es lavar la quinoa (debajo del grifo, no remojar) y ponerla en un cazo con el doble de caldo (o agua) hirviendo, primero 2 ó 3 minutos a fuego vivo y después 15 minutos al mínimo y tapado casi del todo, vereis que se bebe todo el líquido.


Mientras se corta la cebolla y el calabacín en brunoise (cuadraditos pequeños), se sofríe con un poco de aceite de oliva y se pone a punto de sal.
Se asa la pechuga salpimentada.






Se lava y se corta la lechuga, se aliña con aceite de oliva, vinagre caramelizado y sal.
Se añade la pechuga asada y cortada a tiras finas a la cebolla y el calabacín salteado y se añaden también las pasas y se le da a todo una vuelta.


Se añade la quinoa cocida.


Se acompaña con la lechuga y ... a comeeer!!


Quinoa con verduritas y bacon.

El sofrito de verduras con la quinoa es de por sí un buen acompañamiento para cualquier plato.
La pechuga y las pasas se pueden cambiar por otros ingredientes como aguacate, langostinos, gambones, fiambre o bacon.
El sutil sabor a fruto seco que tiene la quinoa combina con todo, probadla y ya me contareis.

Bye.