Hola, hola esta receta está pensada y dedicada a una persona muy especial, es una amiga que pasa por un mal momento de salud. Cuando uno pasa por un mal momento de salud es cuando se da cuenta que los otros "malos momentos" se quedan en simples anécdotas y que con salud todo se supera, por desgracia sé muy bien de qué hablo, pero bueno lo dejo aquí, hay mirar siempre hacia adelante y para atrás ni para coger impulso.
Compré un bote de té matcha y la verdad es que no le había dado mucho uso pero este cake ha quedado tan bueno que lo ha sacado definitivamente del fondo del armario je, je, el sabor de la mantequilla y la vainilla hacen un tándem perfecto con el té y el cacao lo acaba de redondear.
El formato se puede cambiar sólo hay que dejarlo más o menos tiempo en el horno. De hecho la primera prueba que hice fueron unos minimuffins que además llevaban un topping de avellanas.
El té matcha es un antioxidante superpotente, dicen que una taza de té matcha contiene los antioxidantes de 10 tazas de un té verde común, esto se debe a que al ser un té pulverizado se consumen sus hojas mientras que los otros sólo se infusionan y las hojas se desechan.
Es un excelente quemador de calorías, combate el colesterol y el azúcar en sangre, y también es antiinflamatorio.
Ingredientes:
3 huevos.
125 grs, de mantequilla.
190 grs, de azúcar.
1 cucharada de esencia de vainilla.
200 grs. de harina.
10 grs. de levadura Royal.
5 grs. de té matcha.
1 pellizquito de sal.
120 grs. de leche.
2 cucharadas (de postre) de cacao puro.
20 avellanas tostadas (opcional).
Azúcar glas (opcional).
Batir la mantequilla con el azúcar hasta que blanquee y se esponje.
Añadir los huevos 1 a 1 e ir batiendo para incorporarlos.
Añadir la vainilla.
Tamizar la harina, el impulsor (Royal) y la sal. Añadir la mitad a la mezcla anterior removiendo con una espátula de silicona, ahora la mitad de la leche y así con los ingredientes secos y el resto de la leche.
Cuando esté todo mezclado y sea una crema fina y sin grumos se divide en dos, a una mitad se le añade el té matcha, a la otra el cacao y se remueve hasta incorporar.
Se enciende el horno a 200 grados, calor arriba y abajo.
Se elige el molde, yo en este caso he elegido uno de bundt cake que queda muy vistoso pero eso es lo de menos, cualquiera sirve je, je.
Lo pincelé con aceite para garantizar un desmoldado perfecto.
Se pone primero la masa con té y luego la de cacao y con una brocheta se hacen remolinos para que se mezcle. Se mete al horno caliente, yo éste lo tuve 40 minutos a 180 grados pero los minimuffins los tuve 18 m.
Cuando esté listo se saca del horno y se deja atemperar sobre una rejilla, hay que tener paciencia para desmoldarlo y que salga bien.
Cuando está totalmente frío se espolvorea con azúcar glas, si se desea y ya está, ya tenemos un cake diferente y buenísimo.
Bye.