Se puede hacer con merluza fresca, con gambas gordas con lo que queráis pero para un día normal yo lo hago con filete de merluza congelado sin piel y con gamba arrocera congelada que sale muy gustosa y bien de precio, lo que no me gusta es la gamba pelada congelada porque no me sabe a nada. Para recetas de diario hay que buscar los ingredientes que más se ajusten a nuestro presupuesto.
Así que lo primero que hago es cortar los calabacines a la larga en dos, con una puntilla le hago una marca a un centímetro del borde sin cortar la base y unos cortes para después sacar la carne fácilmente, los meto en el horno caliente unos 20 minutos y así es mucho más fácil vaciarlos sin romper la piel, simplemente con una cuchara.
La carne de los calabacines la voy echando a un colador para que pierda toda el agua, ese líquido se puede recuperar por si queremos ponerlo en la bechamel que haremos después.
Los ingredientes que utilizo para 6 personas son:
6 calabacines (si son muy grandes 3, verdes o blancos).
300 grs. de merluza limpia.
150 grs. de gamba ((arrocera para pelar).
1 cebolla tierna mediana.
2 cucharadas de harina.
leche, sal y pimienta blanca.
Aceite y mantequilla.
Pan rallado.
Lo primero que hago es encender el horno a 180 grados para que vaya calentándose.
Se cortan los calabacines a la larga y se le hacen los cortes como los de la foto y se hornean 20 minutos para que se ablanden. Mientras podemos ir preparando el relleno, primero cortamos la merluza a trozos pequeños y pelamos las gambas.
En una sartén salteamos con un poco de aceite el pescado y las gambas, sólo que cambie de color, no lo paséis porque luego va a tener más cocción en el horno.
Sacamos los calabacines del horno y en cuanto se enfrían un poco con una cuchara se va arrastrando la carne, sin romper la piel, y se va echando a un colador con un recipiente bajo para guardar el agua que sueltan
En una sartén grande pongo aceite de oliva y mantequilla (mitad y mitad más o menos) y cuando esté caliente echo la cebolla y dejo que vaya haciéndose sin dorarse demasiado. Cuando la cebolla está transparente se ponen 2 cucharadas soperas de harina y se sofríe, la harina no debe quedar apelotonada si pasa esto añadir un chorrito de aceite y deshacer los grumos. Ir añadiendo leche y removiendo hasta conseguir una crema lisa y suave, salpimentar y añadir también un poco del agua de la carne de los calabacines escurridos. Cuando la bechamel esté lista, hay que procurar que quede espesita, se le añade el pescado y la carne de los calabacines que habremos cortado previamente y se mezcla todo, se rectifica de sal si hace falta y ya está lista para rellenar las mitades de los calabacines.
Se rellenan y se espolvorea con pan rallado y al horno a gratinar.
Calabacines sin hornear. |
Calabacines gratinados. |
Os van a encantar.
Bye.